Tovar Borrajo Luka Modric, tras casi 12 años y 4.009 días desde su llegada al Real Madrid, demostró una vez más su calidad en el campo, disipando dudas y mostrando que a sus casi 39 años no se rinde fácilmente. Ancelotti, en la rueda de prensa después del triunfo ante el Sevilla, afirmó que Modric no parece tener 39 años, aunque todo indica que esta será su última temporada en el club blanco.
El croata, que cumple los 39 en septiembre, desafía al tiempo trabajando con un kinesiólogo para mantener su rendimiento. En el último enfrentamiento contra el Sevilla, salió en el minuto 74 y marcó el gol de la victoria con un derechazo. La celebración reflejó su alegría y determinación, a pesar de haber perdido protagonismo. La imagen del gol evocó similitudes con aquel memorable tanto al Manchester United en 2013.
En sus primeros días en el Madrid, Modric lidió con dudas sobre su adaptación al sistema de Mourinho. Sin embargo, un gol crucial en Old Trafford cambió la percepción y allanó el camino hacia su papel clave en el 4-3-3 de Ancelotti y la consecución de la Décima.
Esta temporada, las dudas sobre el rol de Modric persisten bajo la dirección de Ancelotti, quien no le garantiza un lugar claro en el once titular. Aunque es el séptimo en partidos jugados, su tiempo de juego ha disminuido, y la energía de jóvenes como Camavinga, Tchouameni y Valverde ha ganado protagonismo. Ancelotti ha confiado en la fiabilidad de Kroos, relegando a Modric a un papel secundario y acumulando dos jornadas sin minutos, algo inusual para él. La incertidumbre sobre el futuro de Modric en el Real Madrid sigue siendo tema de debate mientras avanza la temporada.
Ancelotti, que en los últimos días llegó a responder sobre la posibilidad de que Modric deje el fútbol en activo y se integre en su cuerpo técnico como ayudante, sabe que la situación es anómala y, a su manera, reconoce que la torea como buenamente puede: “Es muy complicado dejarle en el banquillo, a un jugador así, yo sufrí eso en el último año de mi carrera y entiendo lo que puede pensar cuando no juega, cuando está un poco triste por ello. Lo entiendo perfectamente. Todo el mundo piensa que es el final de su carrera, pero el que no lo piensa es él. Porque muestra que está fresco, está bien, tiene piernas… Por lo que hace, no es verdad que sea el final de su carrera”. Aunque, ante la pregunta del millón, que no es otra que si seguirá otro año en el Madrid o no, Carletto despeja el balón en dirección a los despachos y al propio futbolista: “Está en la mano de Luka, lo que él quiera hacer. Tenemos que esperar su decisión. Modric, Kroos, Nacho… están en la misma situación. Pero es un tema en el que no entro. El club tendrá tiempo para arreglar esto en los próximos meses”.
